Pueblos con mucho fútbol
Un siglo de historia para un ascenso inolvidable en Puente Genil

Puente Genil vive un momento dulce. El Salerm Puente Genil ha logrado un ascenso histórico a Segunda RFEF, la cuarta categoría del fútbol español, un logro que resuena no solo en el Estadio Manuel Polinario, sino en cada rincón de una localidad con más de cien años de pasión por el balompié. Tras una gran temporada, el cuadro granate se coronó el pasado 11 de mayo como el mejor clasificado del Grupo X de Tercera RFEF, culminando así el proyecto con un histórico ascenso que premia, sin duda, la perseverancia y el amor por el deporte que se respira en Puente Genil.
Para entender la magnitud de este éxito, es necesario viajar en el tiempo. Según recoge La Futbolteca, con distinta bibliografía y fuentes anexas, la historia del fútbol en Puente Genil se remonta a finales de la década de 1910, cuando un grupo de estudiantes y personal del ferrocarril comenzaron a dar las primeras patadas a un balón en los terrenos de “El Tropezón”. De esa afición pionera nacería, entre 1921 y 1922, el Genil Foot-ball Club, el primer equipo formal de la localidad. La inauguración del Campo de Santa Filomena en 1923 fue, sin duda, un salto de calidad, atrajo a equipos de mayor entidad y sembró la semilla de las primeras rivalidades locales con la aparición de clubes como el Athletic Club Ferroviaria o el Hispania FC.

Tras la desaparición del Genil FC, el Club Deportivo Genilense (1927) y, posteriormente, el Genil Racing Club (1931) tomaron el testigo, compitiendo a nivel regional hasta que la Guerra Civil, allá por el 1936, interrumpió la actividad deportiva. El segundo, de hecho, sería quien vistiese por primera vez con camiseta granate y pantalón negro; unos colores que, a día de hoy, son muy conocidos por tierras pontanesas. La posguerra trajo consigo una lenta reorganización que culminaría con la fundación, en 1943, del Club Deportivo Pontanés, una entidad que, con el tiempo, cambiaría su nombre a Puente Genil Club de Fútbol en 1955.
La posguerra marcó un punto de inflexión. El Club Deportivo Pontanés de Educación y Descanso, fundado en 1943, se convirtió en el epicentro del fútbol local y origen del actual Salerm Puente Genil. Desvinculado de la Obra Sindical, en 1946 pasó a denominarse simplemente Club Deportivo Pontanés. Fueron años de consolidación en las categorías regionales, pero también de dificultades que, sin embargo, alcanzarían un cénit absolutamente legendario e irrepetible para el fútbol de la ciudad.
Y es que en la temporada 1956-57, aquel CD Pontanés protagonizó una gesta memorable. Tras una increíble promoción en la que eliminó a rivales como el Recreativo de Huelva, logró el ascenso a Segunda División. Por primera y única vez, Puente Genil tuvo un equipo en la categoría de plata, un honor que en la provincia solo ha ostentado el Córdoba CF. Bajo el nombre de Puente Genil CF para aquella campaña, el equipo hizo del Estadio de Jesús Nazareno un fortín donde cayeron el propio Córdoba y el Real Betis, dejando una huella imborrable en la memoria de la afición. Aquel sueño duró solo una temporada y fue el preludio de una posterior decadencia que acabaría con la desaparición del club, pero su historia se convirtió en leyenda.

A finales de los cincuenta, la aparición de la Juventud Agrupación Deportiva en 1959, que posteriormente se federaría como Puente Genil Industrial, generó una nueva dualidad en el fútbol pontanés. La década de los sesenta y setenta fue un período de altibajos y rivalidades. El Puente Genil Industrial, con su camiseta verdiblanca, y el Club Deportivo Pontanés, con sus colores rojinegros, compitieron por la hegemonía local y, aunque ambos conocieron el sabor de la Tercera División, también sintieron en sus colores la amargura de los descensos y las crisis económicas. La afición por el fútbol en Puente Genil se dividía creando intensos derbis, pero el anhelo de un proyecto unificado y más fuerte comenzaba a ganar peso.
Y ese anhelo se acabó materializando unos años después, más concretamente en 1983. Tras largas negociaciones y conscientes de que la unión hacía la fuerza, la AD Puente Genil Industrial y el Club Deportivo Pontanés decidieron fusionarse. De esta unión nació el Puente Genil Club de Fútbol, una entidad que heredaba la historia y los colores de sus predecesores y que partía con el objetivo de llevar el nombre de la ciudad a lo más alto. De nuevo en las categorías regionales, el club fue creciendo y asentando las bases de lo que vendría tan solo unos pocos años después.
Y es que la historia moderna del fútbol en Puente Genil, ya centrado en el Puente Genil CF, es un relato de adaptaciones a los nuevos tiempos. Con la llegada del nuevo siglo, el club ha ido profesionalizando sus estructuras, adaptando su denominación a los patrocinios -como el actual Salerm Cosmetics Puente Genil- y construyendo un proyecto deportivo sólido y con visión de futuro en torno al Manuel Polinario. Este camino no ha estado exento de dificultades, con temporadas de lucha en la zona media de la tabla y alguna decepción en la búsqueda del ascenso, pero finalmente, este pasado año, ha logrado tocar el cielo.
El camino hacia la gloria
La temporada 2023-2024 fue un preludio de lo que estaba por venir. Aunque el equipo, dirigido entonces por Juanmi Puentenueva, no logró el objetivo de clasificarse para el play off de ascenso, sí consiguió alzarse con el título de la Copa RFAF, un logro que ya dejaba entrever el potencial del plantel confeccionado la pasada temporada. Sin embargo, la campaña 2024-25 será, sin duda, la que quede grabada en la memoria de los aficionados rojinegros. Bajo la dirección de Álvaro Cejudo, el Salerm Puente Genil firmó una temporada casi perfecta en el Grupo X de Tercera RFEF. La lucha por el ascenso directo fue encarnizada con el Ciudad de Lucena, llegando ambos equipos igualados a 68 puntos a la última jornada.
El Salerm Puente Genil no falló en el día clave. Con el apoyo de más de 600 aficionados desplazados a Sevilla, el equipo goleó por 0-4 al CD Inter Sevilla. El delantero Tommy Montenegro, pichichi del equipo e hijo del histórico jugador Ariel Montenegro, abrió el marcador a los nueve minutos, allanando el camino de una victoria que, combinada con la derrota del Ciudad de Lucena en Pozoblanco, desató la euforia pontanesa.
El pitido final dio paso a la celebración, a las lágrimas y a los cánticos de una afición que veía cumplido un sueño. Por primera vez en su historia reciente, el Salerm Puente Genil (fundado tras la fusión de 1983) competirá en Segunda RFEF. Ahora, con la mirada puesta en la temporada 2025-26, el club se enfrenta al reto de consolidarse en la nueva categoría, un desafío que afronta con la misma ilusión y el mismo tesón que han caracterizado sus más de cien años de historia. Puente Genil ya no solo mira a su pasado con orgullo, sino que vislumbra un futuro prometedor en el mapa del fútbol nacional.

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