BOXEO

Rafa Lozano Jr. y José Luis Sáez también se cuelgan el oro y completan un triplete histórico

Si la jornada del viernes fue la de la coronación de Noelia Gutiérrez, la del sábado ha sido la de la confirmación del poderío absoluto del boxeo cordobés. La delegación provincial ha cerrado de manera espectacular su participación en el Campeonato de España Élite en Segovia con otras dos medallas de oro, logradas por Rafa Lozano Jr. y José Luis Sáez. Un triplete histórico que sitúa a Córdoba en la cima del pugilismo nacional.

El primero en subir a lo más alto del podio fue Rafa Lozano Jr., que demostró su condición de púgil de talla internacional en la final de -54 kilos. El diploma olímpico superó con una comodidad pasmosa al manchego Jair Quinteros, tal y como reflejó el unánime 5-0 de los jueces. Desde el inicio, el combate fue un monólogo del cordobés. Su velocidad de piernas anuló por completo la mayor envergadura de su rival, al que castigó repetidamente hasta provocarle una brecha en la nariz que obligó al árbitro a detener la pelea hasta en tres ocasiones solo en el primer asalto. Con la victoria encarrilada, Lozano gestionó los asaltos siguientes con inteligencia, controlando el duelo sin necesidad de hacer más daño a un oponente ya superado.

Por su parte, el fernannuñense José Luis Sáez no fue menos contundente en la final de -75 kilos. El púgil cordobés impartió una lección de cómo usar la ventaja de altura ante el castellanoleonés Hugo Callejo. Sáez castigó con dureza el cuerpo de su adversario, obligando al árbitro a intervenir varias veces para aplicarle cuentas de protección. La superioridad fue tan evidente que la decisión final de los jueces, otro contundente 5-0, no fue más que la crónica de un triunfo anunciado sobre el ring.

Con estas dos medallas, la delegación cordobesa cierra un Campeonato de España élite para el recuerdo. Tres oros en tres finales disputadas que no son fruto de la casualidad, sino del excelente trabajo que se realiza en los gimnasios de la provincia y que ha tenido en Segovia su recompensa más dorada.